Las partículas metálicas actuales de LTO 5 (MP (G5)) tienen un tamaño de aproximadamente 40 nm, mientras que las partículas de BaFe tienen aproximadamente 20 nm. Su menor tamaño permite una densidad de grabación mucho mayor, lo que da lugar a cartuchos de datos de gran capacidad.
Además, Fujifilm logró desarrollar partículas de BaFe aún más pequeñas y demostró una densidad de grabación de 123 mil millones de bits por pulgada cuadrada con IBM en 2015. La demostración apunta a la posibilidad de desarrollar un único cartucho de cinta capaz de contener 220 terabytes de datos sin comprimir. Estas partículas de BaFe, mucho más pequeñas, se aplicarán en futuros productos de BaFe.
Larga vida del archivo
La oxidación es una de las causas del deterioro de las partículas magnéticas con posible pérdida de datos. Sin embargo, la Barium Ferrite ya está oxidada y, por tanto, tiene una vida útil mucho más larga en comparación con las partículas metálicas.
En los experimentos de Fujifilm, el BaFe resiste simulaciones realistas de entornos de almacenamiento y demuestra su fiabilidad durante más de 30 años.
MP muestra una ligera degradación de la señal magnética a lo largo de 30 años, aunque no perjudica el rendimiento de lectura/escritura.